viernes, 29 de mayo de 2015

Presentación Libro "Baltanás, Corral del Aire




María, vela junto a mí...

María, Tú, que velas junto a mí y ves el fuego de mi inquietud; María, Madre, enséñame a vivir, con ritmo alegre de juventud.

 
 
 

Vigésimo Noveno Día: Explicación de las Letanías

Agnus Dei qui tollis percata mundi
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo. Ahora bien, Jesucristo es el verdadero Cordero que ha sido inmolado por los pecados del mundo; porque todos los sacrificios y las oblaciones de la antigua ley eran insuficientes para borrar los pecados, tal como lo explicó el Apóstol en su Epístola a los Hebreos, capítulo X, diciendo: Es imposible que la sangre de los toros y de los machos cabríos quiten los pecados, hacía falta otra víctima, era necesario que un Dios reparara el ultraje que el pecado había hecho a Dios. Por eso, San Pablo, en la Epístola antes citada, escribió que el Hijo de Dios, al entrar a este mundo dijo a su divino Padre: No quieres hostia ni oblación, pero me formaste un cuerpo; para hacernos comprender que Jesucristo era la única víctima digna de agradar a Dios y de reconciliarnos con Él.
Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo, perdónanos, Señor.

Agnus Dei qui tollis percata mundi
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo. Sabemos que San Juan, en su Apocalipsis, capítulo V, siendo raptado en espíritu, vio un cordero como degollado, en medio de un trono, rodeado de cuatro animales y de veiticuatro ancianos que se prosternaban delante de Él, y que millares de Ángeles decían en alta voz: El Cordero que ha sido degollado es digno de recibir poder, divinidad, sabiduría, fuerza, honor, gloria y ahora bien, este Cordero designaba a Jesucristo que es el Cordero de bendición. Dios, degollado desde el comienzo del mundo.
Cordero de Dios que quitas los pecados del mundo, escúchanos Señor.

Agnus Dei qui tollis percata mundi
Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo. Leemos en el capítulo XV del Apocalipsis que San Juan vio siete Ángeles que sostenían siete copas de oro llenas de la cólera de Dios, listos a derramarlas sobre la tierra. Ahora bien, se ha representado la última imagen de esos siete Ángeles cerca del Cordero de Dios, para significar que Jesucristo, siendo el Cordero de Dios inmolado por los pecados del mundo, satisfizo la venganza divina y que las plagas de la cólera de Dios que encerraban las siete copas han sido desviadas de la superficie de la tierra por el mérito de la efusión de su preciosa Sangre.

Ejemplo
San Juan Nepomuceno, vino al mundo en un estado desesperado, y no debió la conservación de su vida sino a la protección de la Santísima Virgen, que era invocada por sus piadosos padres en la iglesia de un monasterio vecino. Este primer favor de María era un feliz presagio para el porvenir: le siguieron la piedad, el celo, la habilidad en la conducción de almas. Juan, por su lado, se mostró digno de las bondades de su divina benefactora, por su viva gratitud y por su confianza filial, que le testimonió frecuentemente, pero sobre todo en la circunstancia gloriosa que lo hizo célebre para siempre. Urgido por el cruel Wenceslao para que revelara la confesión de la emperatriz, su esposa, y entregado por su negativa, al verdugo, recurrió a María y no dejó de invocar su santo nombre junto al de su divino Hijo mientras se le atormentaba. Salió vencedor de esta primera prueba, pero previendo que su perseguidor no se detendría ahí, redobló su fervor hacia la Santísima Virgen y se preparó para el martirio, que en efecto tuvo la dicha de sufrir la noche siguiente.

Dirijámonos a Jesús, por la intercesión de María y obtendremos el perdón de nuestros pecados.

Traducido del francés por José Gálvez Krüger para ACI Prensa.


jueves, 28 de mayo de 2015

Fiesta de Jesucristo, Sumo y Eterno Sacerdote

Hoy celebramos la Fiesta de Jesucristo Sumo y Eterno Sacerdote. Un día para recordar a todos nuestros sacerdotes, para dar gracias a Dios por su ministerio y para pedirle al Señor que sean fieles a su vocación. En este fiesta pedimos al Dueño de la mies que envíe obreros a su mies.




Vigésimo Octavo Día: Explicación de las Letanías

Regina Sacratissimi Rosarii
Reina del Santo Rosario. El Rosario es una fórmula de oraciones en la cual distinguimos veinte decenas de salutaciones angélicas, entremezcladas con oraciones dominicales. En cada una de esas decenas meditamos sobre los misterios. Estos misterios son en total veinte, conformados en cuatro series: 1-. Cinco misterios gozosos que son: La Encarnación, la Visitación de la Santísima Virgen, la Natividad de Nuestro señor, la Presentación en el Templo y el Encuentro de Jesús en medio de los Doctores. 2-. Cinco misterios dolorosos que son: El sudor de sangre en el Huerto de los Olivos, la Flagelación, la Coronación de espinas, Jesús cargado con la Cruz y la Crucifixión. 3-. Cinco misterios gloriosos que son: La Resurrección, la Ascensión, la venida del Espíritu Santo Paráclito, la Asunción de la Santísimima Virgen y su Coronación como Reina de cielos y tierra. 4-. Cinco misterios luminosos que son: El Bautismo de Jesús, la autorrevelación de Jesús en las bodas de Caná, el anuncio del Reino de Dios, la Transfiguración y la institución de la Eucaristía. Se puede dividir el rosario en cuatro series de cinco decenas cada uno y, en ese caso, se tiene cuidado de tomar alternativamente por asunto de meditación las cuatro series de misterios.

El término Rosario significa corona de rosas. Era costumbre en Oriente ofrecer coronas de rosas a las personas que se proponía honrar, y los cristianos se complacían en ofrecer estos presentes a la Santísima Virgen y a los Santos. San Gregorio Nacianceno sustituyó la corona material de rosas por una corona espiritual. Santa Brígida, en el siglo siguiente, tuvo la idea de poner esta corona al alcance de todos, haciéndola componer de las oraciones más ordinarias de la Iglesia. Pero el uso de recitar cinco Pater y diez Ave María, se remonta a Santo Domingo.

Ejemplo.
San Carlo Borromeo tenía la más viva y la más tierna devoción por la Santísima Virgen, que recitaba todos los días, de rodillas el rosario y el oficio de esta Gloriosa Virgen; ayunaba, además, con pan y agua, en las vísperas de Nuestra Señora. Nadie fue más exacto que Él en saludarla a la indicación de la campana; porque si se encontraba en la calle, aunque estuviese cubierta de barro, no dejaba de ponerse de rodillas cuando la campana advertía que era hora de recitar el Ángelus. Quiso tener en su catedral una capilla y una Cofradía del Rosario. Mandaba hacer, además, todos los primeros Domingos del mes una procesión solemne, en la que se trasladaba con mucha pompa una pintura de la Santísima Virgen; quiso que fuese la protectora de todas las fundaciones que hizo; ordenó que en toda su Diócesis se honrara, con gestos de respeto, el sagrado nombre de María, ni bien se le escuchara pronunciar; hizo colocar en todas las portadas de todas las Iglesias parroquiales de su jurisdicción una imagen de la Madre de Dios, para hacer comprender al pueblo que no se puede entrar al templo de la gloria eterna sin el favor de aquella a la que la Iglesia llama Puerta del Cielo.

Rezando el Rosario, pensamos en los misterios de Cristo.

Traducido del francés por José Gálvez Krüger para ACI Prensa


miércoles, 27 de mayo de 2015

Salve Rociera

Dios te salve María
del Rocío Señora.
Luna, Sol, Norte y Guía
y Pastora Celestial.
Dios te Salve María
todo el pueblo te adora
y repite a porfía:
Como Tú no hay otra igual.
Olé, olé, olé, olé, olé,
olé, olé, olé, olé, olé, olé, olé,
olé, olé, olé, olé, olé, olé, olé.
Al Rocío yo quiero volver
a cantarle a la Virgen con fe con un
olé, olé, olé, olé, olé,
olé, olé, olé, olé, olé, olé, olé,
olé, olé, olé, olé, olé, olé, olé.
Al Rocío yo quiero volver
a cantarle a la Virgen con fe con un olé.


Dios te Salve María
manantial de dulzura.
A tus pies noche y día
te venimos a rezar.
Dios te Salve María
un rosal de hermosura.
Eres tu Madre mía
de pureza virginal.
Olé, olé, olé, olé, olé,
olé, olé, olé, olé, olé, olé, olé,
olé, olé, olé, olé, olé, olé, olé.
Al Rocío yo quiero volver
a cantarle a la Virgen con fe con un
olé, olé, olé, olé, olé,
olé, olé, olé, olé, olé, olé, olé,
olé, olé, olé, olé, olé, olé, olé.
Al Rocío yo quiero volver
a cantarle a la Virgen con fe con un olé.
Olé, olé, olé, olé, olé,
olé, olé, olé, olé, olé, olé, olé,
olé, olé, olé, olé, olé, olé, olé.
Al Rocío yo quiero volver
a cantarle a la Virgen con fe con un
olé, olé, olé, olé, olé,
olé, olé, olé, olé, olé, olé, olé,
olé, olé, olé, olé, olé, olé, olé.




Vigésimo Séptimo Día: Explicación de las Letanías

Regina sine labe originale concepta
Reina concebida sin pecado original. Amadísimos hermanos, dice Bossuet, ¿que les parece? ¿Qué piensan de esta doctrina?... Para mí, cuando considero al Salvador Jesús, nuestro amor y nuestra esperanza, entre los brazos de la Santísima Virgen o tomando su leche virginal, o reposando dulcemente en su seno, o encerrado en sus castas entrañas. Cuando miro lo incomprensible así encerrado y esta Inmensidad como resumida, cuando veo a mi Liberador en esa estrecha y voluntaria prisión, me digo algunas veces: ¿Se podría hacer que Dios abandonara al diablo, aunque no fuese sino un momento ese templo sagrado que destinaba a su Hijo, ese santo tabernáculo, donde tomó un largo y admirable reposo, ese lecho virginal, donde celebró sus nupcias del todo espirituales con nuestra naturaleza? Es de esta manera que hablo conmigo mismo. Luego, volviéndome hacia el Salvador; Niño bendito, le digo: ¡No sufras más, no permitas que tu Madre sea violada! ¡Ah si Satán osara abordarla, mientras que, permaneciendo en Ella, haces un paraíso, cuántos rayos harías caer sobre su cabeza! Con qué celo defenderías el honor y la inocencia de tu Madre. Pero, ¡oh Niño bendito!, por quien los siglos fueron hechos, Tu estás antes de todos los tiempos. Cuando tu Madre fue concebida, la miraste desde lo más alto de los Cielos; Tú mismo formaste sus miembros, fuiste Tú quien le dio el soplo de vida, que animó esa carne de la que saldría la tuya. ¡Ah!, date cuenta, Sabiduría eterna, que en este mismo momento, va a ser infectada con un horrible pecado; va a ser la posesión de Satán. Desvía está desgracia por tu bondad, comienza por honrar a tu Madre, haz que le aproveche tener un Hijo que está antes que Ella, porque finalmente, bien entendido todo, Ella ya es tu Madre y Tú ya eres su Hijo.

Ejemplo
El célebre Alejandro de Halès, que fue una de las lumbreras de la Universidad de París, experimentó, en su persona misma, el interés que la Santísima Virgen tiene en la gloria de su Inmaculada Concepción. Ese gran teólogo, siendo doctor y profesor en París, no se preocupaba por celebrar esta fiesta, porque tenia sus dudas acerca de la verdad del misterio de la Concepción Inmaculada; pero Dios permitía que cada año, el ocho de diciembre, día de esta fiesta, cayera enfermo y que sufriera grandes dolores. Esto, habiendo ya ocurrido varios años seguidos, fue percibido por sus alumnos como una circunstancia singular, ya que coincidía siempre cada año el mismo día; le aconsejaron abrazar la firme creencia en el misterio de la la Concepción pura y sin mancha de la Madre de Dios. Se resolvió a ello, e hizo el voto que si el Señor le concedía la gracia de librarlo de esta enfermedad anual, escribiría un libro en honor de la Inmaculada Concepción. Este voto detuvo inmediatamente el curso de sus enfermedades. Toda la Facultad de París, que fue testigo, se alegró de la salud de su maestro; satisfizo su promesa y compuso una obra en honor de la Santísima Virgen. Se empeñó, particularmente, en  sostener el privilegio de su santísima concepción; relató el prodigio ocurrido a su persona; finalmente, se retractó de todo lo que pudo decir o escribir en contra de ese glorioso misterio de María concebida sin pecado.

Conservemos nuestro corazón puro, o purifiquémosle mediante la penitencia, si hemos tenido la desgracia de ofender a Dios; ganaremos así el Corazón de la Virgen Inmaculada.

Traducido del francés por José Gálvez Krüger para Aci Prensa


martes, 26 de mayo de 2015

Vigésimo Sexto Día: Explicación de las Letanías

Regina apostolorum
Reina de los Apóstoles. El título de Reina de los Apóstoles conviene tanto a María que si los Apóstoles instruyeron a los pueblos de toda la tierra, ellos lo fueron por María; porque según San Bernardo, los Apóstoles recurrieron a Ella en sus dudas y cuando querían estar seguros de las intenciones de Jesucristo sobre algún punto de su creencia. Por otro lado, si cada uno de ellos destruyeron el paganismo en la parte del mundo que le correspondió por la partición que hicieron entre ellos, María disipó y disipa todavía las herejías en todos los países del mundo. Alégrate Virgen María, Tú sola destruyes las herejías en todo el universo.

Regina martyrum
Reina de los Mártires. No se podría honrar a María como se debe si no se la reconoce como Reina de los Mártires, porque aunque Ella no haya derramado su sangre por la confesión de la fe, sin embargo sufrió con más confianza y amor que todos los mártires. Y por  decirlo todo con una sola palabra, sufrió en corazón maternal todo lo que el Rey de los mártires, Jesucristo, su divino Hijo, soportó en su carne inocente.
Reina de los Mártires ruega por nosotros.

Regina confessorum
Reina de los Confesores.  Pues si se llama confesores a aquellos que confesaron a Jesucristo, ¿se rehusará el título de Reina de los Confesores a la que confesó con una firmeza y una constancia incomparablemente superior a la suya? Ella lo siguió no sólo en medio de los oprobios y tormentos de su Pasión, sino que subió generosamente al Calvario con Él, para verlo consumar el sacrificio de nuestra redención. Los Apóstoles habían reconocido a Jesucristo como Hijo del Dios vivo, pero en el tiempo de la Pasión, infieles a la confesión de su fe, lo disimularon y escaparon. No ocurrió así con María, que siempre constante y fiel, lo reconoció como su Dios en todo el curso de su Pasión y sobre la Cruz.


Regina Virginum
Reina de las Vírgenes. De todos los títulos, honores y alabanzas que se da a María, el de Reina de la Vírgenes le conviene por excelencia, porque ella es el prototipo de la virginidad, ya que fue la primera que se comprometió por un voto de virginidad perpetua. La virginidad, antes de su tiempo, era tan despreciada que la hija de Jefté, estando a punto de ser inmolada por su padre, antes de haberse casado, fue a llorar su virginidad a los montes. Pero desde que María elevó la gloria de la pureza virginal, se vio consagrarse a millones de vírgenes, a Jesucristo como a su único Esposo según esas palabras del profeta en el salmo XLIV: Después de ellas, conducirán vírgenes al Rey.

Regina sanctorum omnium
Reina de todos los Santos. Finalmente, el título de Reina de todos los Santos que la Iglesia da a María, encierra las más grandes alabanzas que sea posible darle, porque anuncia que es superior a los Santos de todos los órdenes. En efecto, María conforma un orden separado en el Cielo; y para juzgar el alto punto de su gloria, hay que remarcar que Dios glorificó a su propia Madre. Por ese motivo se ha representado a los Ángeles y a los Santos de todo orden ofreciendo a María sus coronas, para significar que ella reina en el Cielo por encima de ellos.

Ejemplo
Una peste terrible despoblaba la ciudad de Roma, el Papa San Gregorio Magno había predicado la penitencia, ordenado oraciones públicas, hecho votos, pero la peste continuaba sus estragos, hasta que tomó el partido de volverse directamente hacia la Madre de Dios, y ordenó que el clero y el pueblo fuesen en procesión general a la Iglesia de Nuestra Señora, llamada Santa María la Mayor, y que se llevara por toda la ciudad la imagen de la Santísima Virgen, pintada por san Lucas. Esta procesión detuvo perfectamente el curso de esta calamidad. Fue maravilloso ver que por todos los lugares donde la imagen pasaba, cesaba la peste enteramente; y antes del fin de la procesión se vio sobre la terraza de Adriano, hoy llamada Castillo del Santo Ángel, un Ángel en forma humana que guardaba una espada ensangrentada en su vaina. Al mismo tiempo se escuchó a los Ángeles cantar esta antífona de la Santísima Virgen. Regina Coeli, laetare alleluia, etc. El Santo Pontífice agregó: ora pro nobis, Deum, ruega a Dios por nosotros; y la Iglesia ha empleado siempre desde entonces esta oración para saludar a la Santa Virgen en tiempo de Pascua.

Sirvamos a María, como nuestra Reina, Ella no se dejará vencer en generosidad.

Traducido del francés por José Gálvez Krüger para ACI Prensa

Vigésimo Quinto Día: Explicación de las Letanías

Regina angelorum
Reina de los Ángeles. Si se da a María el título glorioso de Reina de los Ángeles es porque en calidad de Madre del Creador y del soberano Señor de los Cielos, sobrepasa en gloria a todas las inteligencias celestes. Es lo que reconoce la Iglesia cuando canta, en el día de la Asusnción de la Santa Virgen: La Santa Madre de Dios se elevó al Reino del los cielos por encima de todos los Ángeles. También los Ángeles con un afecto digno de las complacencias de Dios mismo, no dejan de expresarle la ternura de sus sentimientos que los animan, mediante exclamaciones de alegría en las bendiciones que le dan.

Regina Patriarcarum
Reina de los Patriarcas. Si Noé, Abrahán y los antiguos Padres que vivieron, hasta tiempos de Moisés, son llamados los Patriarcas del Antiguo Testamento, para que fueran los primeros jefes de familias, donde se conservó fielmente el recuerdo de Dios: y si se llama a San Agustín, San Benito y otros fundadores de Órdenes Religiosas los Patriarcas del Nuevo Testamento, porque son los jefes y como padres de las familias religiosas que se dedicaron especialmente al servicio de Dios, es justo el título que se da a María en calidad de Reina de los Patriarcas, porque siendo la Madre de Jesucristo, que es el Rey de los Patriarcas, el autor y consumador de la fe, Ella es por esta calidad la Reina de los Patriarcas de la antigua y de la nueva ley.

Regina profetarum
Reina de los Profetas. Si a partir del texto del Apocalipsis, capítulo XIX, el testimonio que se rinde a Jesucristo es el espíritu de profecía, María ¿no debe ser mirada como la Reina de los profetas puesto que Ella rindió incomparablemente un testimonio de Jesucristo mayor que el que rindieron los profetas, porque Ella lo engendró, lo reconoció como su Dios y siguió en todos los pasos de su Pasión, hasta el pie de la Cruz?.

Ejemplo
San Francisco Javier, Apóstol de las Indias y del Japón, no se demoró en ceder a los requerimientos de la gracia, que sintió nacer al mismo tiempo en su corazón, un tierno amor por María y un vivo deseo de imitarlo. Con miras a honrar su pobreza, y de afirmarse en esta virtud que miraba como indispensable para un obrero evangélico, eligió, para prepararse, mediante un retiro de horas, para celebrar su primera Misa, un reducto abandonado que le representaba el establo de Belén. Su amor por María fue siempre en aumento: le encomendaba todas sus empresas; alentaba a todos a hacer lo mismo. Dios justificó su confianza, y aprobó sensiblemente su celo concediendo a menudo milagros con solo tocar su Rosario. Desligado de todo en la muerte tal como fue en la vida, y abandonado por sus amigos en un río lejano, este hombre apostólico encontró su consolación en María, no dejando de dirigirle a Ella hasta su último suspiro, estas palabras; Mostra te esse Matrem.
María, nuestra Madre es Reina, invoquémosla con confianza.

Transcripción de José Gálvez Krüger para ACI Prensa


domingo, 24 de mayo de 2015

Solemnidad de Pentecostés

Hoy celebramos la Solemnidad de Pentecostés, que pone fin al tiempo de Pascua, por lo que el Cirio Pascual, que representa a Cristo Resucitado, ya no presidirá nuestras celebraciones dominicales. Comienza ahora el tiempo de la Iglesia. Somos enviados, con la fuerza del Espíritu Santo, a proclamar la Buena Noticia del Evangelio a todo el mundo.
Señor, queremos ser tus testigos, pero sólos no podemos. Necesitamos tu fuerza, por lo que te pedimos que derrames tu Espíritu Santo en nuestras vidas para que proclamemos siempre la Verdad. Nuestro mundo necesita escuchar Tu Verdad y nosotros anunciaremos Tu Reino de Paz y Justicia, de Vida y Verdad. 

ORACIÓN PARA PEDIR LOS DONES DEL ESPÍRITU SANTO
Ven, Espíritu Creador, visita las almas de los fieles; e inunda con tu gracia los corazones que Tú creaste.
Espíritu de Sabiduría, que conoces mis pensamientos más secretos, y mis deseos más íntimos, buenos y malos; ilumíname y hazme conocer lo bueno para obrarlo, y lo malo para detestarlo sinceramente.
Intensifica mi vida interior, por el don de Entendimiento.
Aconséjame en mis dudas y vacilaciones, por el don de Consejo.
Dame la energía necesaria en la lucha contra mis pasiones, por el don de Fortaleza.
Envuelve todo mi proceder en un ambiente sobrenatural, por el don de Ciencia.
Haz que me sienta hijo tuyo en todas las vicisitudes de la vida, y acuda a Ti, cual niño con afecto filial, por el don de Piedad.
Concédeme que Te venere y Te ame cual lo mereces; que ande con cautela en el sendero del bien, guiado por el don del santo Temor de Dios; que tema el pecado más que ningún otro mal; que prefiera perderlo todo antes que tu gracia; y que llegue un día a aquella feliz morada, donde Tú serás nuestra Luz y Consuelo, y, cual tierna madre; enjugas “toda lágrima de nuestros ojos”, donde no hay llanto ni dolor alguno, sino eterna felicidad. Así sea.




¡Ven, Espíritu Creador!

VEN, ESPÍRITU CREADOR
Rezada a diario por el Papa Juan Pablo II*

Ven, Espíritu Creador,
visita las almas de tus fieles
y llena de la divina gracia los corazones,
que Tú mismo creaste.


Tú eres nuestro Consolador,
don de Dios Altísimo,
fuente viva, fuego, caridad
y espiritual unción.

Tú derramas sobre nosotros los siete dones;
Tú, el dedo de la mano de Dios;
Tú, el prometido del Padre;
Tú, que pones en nuestros labios los tesoros de tu palabra.

Enciende con tu luz nuestros sentidos;
infunde tu amor en nuestros corazones;
y, con tu perpetuo auxilio,
fortalece nuestra débil carne.

Aleja de nosotros al enemigo,
danos pronto la paz,
sé Tú mismo nuestro guía,
y puestos bajo tu dirección,
evitaremos todo lo nocivo.

Por Ti conozcamos al Padre,
y también al Hijo;
y que en Ti, Espíritu de entrambos,
creamos en todo tiempo.

Gloria a Dios Padre,
y al Hijo que resucitó,
y al Espíritu Consolador,
por los siglos infinitos. Amén.

V. Envía tu Espíritu y serán creados.
R. Y renovarás la faz de la tierra.

Oremos.
Oh Dios, que has iluminado los corazones de tus hijos con la luz del Espíritu Santo; haznos dóciles a tu Espíritu para gustar siempre el bien y gozar de su consuelo.
Por Jesucristo Nuestro Señor.
R. Amén.

* En Enero de 1980, Juan Pablo II, hablando a un grupo de la renovación carismática dijo:
Yo desde pequeño aprendí a rezarle al Espíritu Santo. Cuando tenía 11 años, me entristecía porque se me dificultaban mucho las matemáticas. Mi padre, me mostró en un librito el Himno '"VEN CREADOR ESPIRITU"', y me dijo: Rézalo y verás que El te ayuda a comprender. Llevo mas de 40 años rezando este himno todos los días y he sabido lo mucho que ayuda el Divino Espíritu.




Oración a María Auxiliadora



Vigésimo Cuarto Día: Explicación de las Letanías

Consolatrix afflictorum
Consoladora de los afligidos. ¿No tenemos incontables efectos de los milagrosos de la protección de María? ¿No hay una gran cantidad de monumentos erigidos en su honor como reconocimiento de los desventurados que auxilió? ¿Existe algún hombre que haya reclamado su asistencia en vano? Su caridad es tan solícita que nos asiste, a menudo, en nuestras necesidades, sin esperar que la invoquemos, un solo pensamiento, un solo deseo de implorarla basta para que comience a asistirnos.

Auxilium christianorum
Auxilio de los cristianos. La gratitud  que los cristianos tienen a María, favorecidos en todo tiempo con su protección, les ha inspirado a llamarla Su Auxilio, a compararla con una torre fortificada y a mirarla como asilo seguro contra todos sus enemigos. Y la Iglesia, aprobando este testimonio de su gratitud hacia su protección, y considerando los poderosos auxilios que el pueblo cristiano ha recibido siempre de la Virgen, le dirige las palabras que se lee en el capítulo IV del Cantar de los cantares. Tu cuello es como la torre de David que está edificada con bulevares; mil escudos cuelgan de ella, y todas las armas de los más valientes.

Ejemplo
Fue delante de una imagen de la Santísima Virgen y merced a su protección que San Francisco de Sales obtuvo la liberación de una pena interior, la más grande que se pueda experimentar. Mientras estaba en su período de estudios, pensó que era un réprobo que estaría por siempre desterrado de la vista de Dios; era como si estuviese persuadido. Uno puede imaginar qué tormento tan cruel debía ser este pensamiento para un alma tan cercana a Dios como la suya. Se consumía a ojos vista, enflaquecía y palidecía en extremo. En esa situación tan afligida, recurrió a la Santísima Virgen; se prosternó delante de su imagen, formó estos generosos sentimientos: “Si soy tan desventurado para merecer estar siempre en la desgracia de mi Dios, quiero al menos tener el consuelo de amarlo con todo el corazón durante mi vida entera: sí, mi Dios, si no puedo amarte después de mi muerte, quiero amarte doblemente mientras viva. Estando en estos pensamientos, ni bien miró la pintura de la Madre de Gracia para interesarla en su destino, en el mismo momento, se sintió aliviado y totalmente liberado de su pena, de suerte que su rostro retomó los colores y su serenidad en el lugar mismo de la oración.
Hacia fines del siglo XVI, la cristiandad estuvo amenazada por los turcos con una desolación general, y el Papa Pío V alentó  a los fieles a poner toda su confianza en María. Toda Europa se puso a orar y se acudió de todos los lugares a Nuestra Señora de Loreto, para implorar la asistencia de la Madre de Dios. Desde entonces el piadoso Pontífice no dudó en la victoria. Fue una de las más gloriosas y completas. El Papa que había recibido una revelación, estaba personalmente persuadido de que era efecto de la protección de la Santísima Virgen, que instituyó para esta ocasión una nueva fiesta en su honor, que es la del Rosario, e hizo agregar a las letanía la invocación: Auxilium christianorum.

En las aflicciones y en las  dificultades, recurramos a Nuestra Madre del Cielo.



sábado, 23 de mayo de 2015

¡Ven, Espíritu de Dios sobre mí!

Ven Espíritu de Dios sobre mí, me abro a tu presencia, cambiarás mi corazón, Ven Espíritu de Dios sobre mí me abro a tu presencia, cambiarás todo mi ser...


Renuévame, Señor Jesús




Renuévame, Señor Jesús
ya no quiero ser igual;
renuévame, Señor Jesús
pon en mi tu corazón.
Porque todo lo que hay dentro de mi
necesita ser cambiado Señor,
porque todo lo que hay dentro de mi corazón
necesita mas de Ti.


Vigésimo Tercer Día: Explicación de las Letanías

Salus infirmorun
Salud de los enfermos. Para rendir homenaje al poder de María, se la llama Salud de los enfermos, porque teniendo todo poder ante Aquel de quien el profeta dijo en el salmo CII: Es el que cura todas la enfermedades, el que devuelve la salud a los enfermos que lo invocan; porque si Jesucristo dio a los Apóstoles el poder de curar a los hombres de toda clase de enfermedades, ¿quién dudará que la Madre de Dios, de quien dice el Salmo LXXXVI: Se ha dicho de Ti cosas gloriosas, ¡Oh ciudad de Dios! Tenga el mismo poder? ¿Quién dudará en creer que su poder sea igual a la gloria que goza en el Cielo?

Refugium peccatorum
Refugio de los pecadores. Es cierto que los pecadores, según San Juan, encuentran en Jesucristo un Abogado delante del Padre celeste, que compadecido de nuestras enfermedades intercede por ellos, pero como después de haber ofendido al mismo Jesucristo, temen la cólera de Cristo, no les queda sino María como refugio en su desventurado estado. Es lo que Ella parece ofrecer, siguiendo las palabras del salmo LXXXVI, que se pone en sus labios. Me acordaré de Rahab de Babilonia, que me conocerán. Promesa verdaderamente consoladora para los pecadores que han sido figurados mediante los nombres de estas dos ciudades. Abrochémonos a Ella con confianza, reconozcamos su ternura, y encomendándonos a su recuerdo, pidámosle que nos obtenga el perdón de nuestros pecados.

Ejemplo
El V. P. Bernard, ese sacerdote tan célebre en París en el siglo XIX, por su caridad hacia los prisioneros y por su devoción a la Santísima Virgen, conducía al patíbulo a un hombre condenado a ser colgado: este desventurado, a sus crímenes anteriores, agregaba ahora horribles blasfemias contra Dios. Aunque hubiese colmado la paciencia de aquellos que lo habían exhortado, el Padre Bernard no se desalienta; sube con él hasta el cadalso, y empeña con él todo el celo posible, y como quiso abrazarlo, el malvado lo rechazó de un puntapié, y furioso, lo arrojó al pie de la escalera, sobre el empedrado. El Padre Bernard, aunque herido, se levanta, se arrodilla e invoca a su potente Mediatriz, por su oración ordinaria: Memorare, o piisima! Etc. ¡Admirable efecto de su protección! La oración no había terminado y se vio al sentenciado estallar en lágrimas de penitencia, convertirse, pedir perdón, confesarse y edificar con su arrepentimiento, tanto como había horrorizado por su obstinación.

Si tenemos la desventura de ofender a Dios, recurramos a María, refugio de los pecadores, roguemos por la conversión de las almas que nos son queridas.

Traducido del francés por José Gálvez Krüger para ACI Prensa.


viernes, 22 de mayo de 2015

22 de Mayo: Festividad de Santa Rita de Casia


Hoy celebramos la festividad de Santa Rita de Casia, Patrona de las víctimas de abusos, personas en soledad, contra la esterilidad, enfermedades del cuerpo, causas desesperadas y perdidas, matrimonios con dificultades, infertilidad, viudas, padres. En Baltanás, contamos con una talla suya en la Ermita de Nuestra Señora de Revilla y durante años un grupo de devotos han rezado la Novena en su honor, por lo que cuenta con gran devoción entre los fieles.

ORACIÓN PARA PEDIR UN FAVOR
Santa de lo Imposible. Oh Santa Patrona de los necesitados, Santa Rita, cuyas plegarias ante el Divino Señor son casi irresistibles, quien por la generosidad en otorgar favores has sido llamada Mediadora de los sin esperanza e incluso de lo Imposible; Santa Rita, tan humilde, tan pura, tan mortificada, tan paciente y de tan compadecido amor por Jesús Crucificado que podrías obtener de Él cualquier cosa que le pidas. A cuenta de esto recurrimos confiados a ti, esperando, si no siempre alivio, al menos consuelo. Sé favorable a nuestra petición, mostrando el poder de Dios a nombre de este/a suplicante, sé generosa con nosotros, como lo has sido en tantos casos maravillosos, para la más grande gloria de Dios, por la divulgación de tu propia devoción, y por el consuelo de aquellos que confían en Ti. Prometemos, si nuestra petición es concedida, glorificar tu nombre, informando del favor concedido, para bendecir y cantar tus alabanzas por siempre. Confiando entonces en los méritos y poder ante el Sagrado Corazón de Jesús, te rogamos:
(Mencione ahora su petición)

Obten para nosotros nuestra petición:
Por los singulares méritos de tu infancia,
Por la perfecta unión con la Divina Voluntad,
Por los heroicos sufrimientos durante tu vida de casada,
Por el consuelo que experimentaste con la conversión de tu esposo,
Por el sacrificio de tus niños antes de verlos ofender gravemente a Dios,
Por tu milagrosa entrada al Convento,
Por las austeras penitencias y las sangrientas ofrendas tres veces al día.
Por el sufrimiento causado por la herida que recibiste con la espina del Salvador Crucificado;
Por el amor divino que consumió tu Corazón,
Por la notable devoción al Sagrado Sacramento, con el cual exististe por cuatro años,
Por la felicidad con la cual partiste de tus pruebas para reunirte con el Divino Esposo,
Por el ejemplo perfecto que diste a la gente de cada estado de vida.
Santa de lo Imposible.

Oremos
Oh Dios, Quien en tu infinita ternura has sido bondadoso para escuchar la plegaria de Tu sierva, Santa Rita, y otorgas a su suplica lo que es imposible a la vista, conocimiento y esfuerzos, en recompensa de su compadecido amor y firme confianza en Tu promesa, ten piedad en nuestra adversidad y socórrenos en nuestras calamidades, que el no creyente pueda saber que Tú eres la recompensa del humilde, la defensa de los sin esperanza, y la fuerza de aquellos que confían en Ti, a través de Jesucristo, nuestro Señor. Amén.
__________
ORACIÓN PARA LOS CASOS DESESPERADOS
Oh poderosa Santa Rita, llamada Abogada de los casos desesperados, socorredora en la última esperanza, refugio y salvación en el dolor, que conduce al abismo del delito y de la desesperación: con toda la confianza en tu celestial poder, recurro a Ti en el caso difícil e imprevisto que oprime dolorosamente mi corazón.
Dime, oh Santa Rita, ¿no me vas a ayudar Tú?, ¿no me vas a consolar? ¿Vas a alejar tu mirada y tu piedad de mi corazón, tan sumamente atribulado? ¡Tú también sabes lo que es el martirio del corazón, tan sumamente atribulado! Por las atroces penas, por las amargas lágrimas que santamente derramaste, ven en mi ayuda. Habla, ruega, intercede por mí, que no me atrevo a hacerlo, al Corazón de Dios, Padre de misericordia y fuente de toda consolación, y consígueme la gracia que deseo (indíquese aquí la gracia deseada). Presentada es seguro que me escuchará: y yo me valdré de este favor para mejorar mi vida y mis costumbres, para cantar en la tierra y en el cielo las misericordias divinas.
Padrenuestro, Avemaría y Gloria.
__________
ORACIÓN
Oh Dios omnipotente, que te dignaste conceder a Santa Rita tanta gracia, que amase a sus enemigos y llevase impresa en su corazón y en su frente la señal de tu pasión, y fuese ejemplo digno de ser imitado en los diferentes estados de la vida cristiana. Concédenos, por su intercesión, cumplir fielmente las obligaciones de nuestro propio estado para que un día podamos vivir felices con ella en tu reino. Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor. Amén.

Presentación del Libro "Baltanás, Corral del Aire. Ruta de las Cabañas Pastoriles".


El Señor os dará su Espíritu Santo




Ofrecimiento diario

Ven Espíritu Santo,
inflama nuestros corazones
en las ansias redentoras del Corazón de Cristo,
para que ofrezcamos de veras
nuestras personas y obras
en unión con Él
por la redención del mundo.

Señor mío y Dios mío Jesucristo.
Por el Corazón Inmaculado de María
me consagro a tu Corazón
y me ofrezco contigo al Padre
en tu Santo Sacrificio del altar,
con mi oración y mi trabajo,
sufrimientos y alegrías de hoy
en reparación de nuestros pecados
y para que venga a nosotros tu Reino.

Te pido en especial:
Por el Papa y sus intenciones.
Por nuestro Obispo y sus intenciones.
Por nuestro Párroco y sus intenciones.

Oh Dios, que en el corazón de tu Hijo,
herido por nuestros pecados,
has depositado infinitos tesoros de caridad;
te pedimos que,
al rendirle el homenaje de nuestro amor,
le ofrezcamos una cumplida reparación.
Por Jesucristo nuestro Señor.
R. Amén.

Vigésimo Segundo Día: Explicación de las Letanías

Janua coeli
Puerta del Cielo. Los fieles, llamando a María la Puerta del Cielo, siguen a los Padres de la Iglesia que le dieron este nombre. Esta cualidad le conviene tan perfectamente, que es en el dichoso momento en el que el Verbo divino se dignó encarnar en su casto seno que nos convertimos en los herederos del Cielo y los coherederos de Jesucristo. Por eso, los patriarcas y los justos del Antiguo Testamento, detenidos en los limbos hasta el momento en que debían ser introducidos en el Cielo por el vencedor del pecado y de la muerte, exclamaron sin cesar delante de María, según las palabras de San Agustín: “Virgen perpetua”. Abre tu seno que es bermejo como una rosa, porque es tu fe la que abre y cierra el Cielo”.

Stella matutina
Estrella de la mañana. Para conocer el motivo de dar a María el título de Estrella de la mañana, consideremos que al igual que las sombras de la noche huyen al momento en que esta estrella aparece y anuncia el nacimiento del sol; igualmente, María, mil veces más brillante que la aurora, apareció para anunciar el nacimiento del Sol de justicia  y para dar al mundo a aquel que debía traer la luz y la verdad, y disipar las tinieblas de la idolatría y de la ignorancia que cubrían casi todo el universo antes del nacimiento de su divino Hijo.

Ejemplo
San Francisco de Sales, Obispo de Ginebra, cuya rara modestia y vida ejemplar eran una imagen semejante a la de María, había recibido, desde su juventud, una prueba milagrosa de la protección de esta divina Virgen, por la liberación súbita de una tentación de desesperanza espantosa. Su confianza en esta tierna Madre se redobló desde entonces, y no dejó de testimoniar su reconocimiento. Aunque encargado de dirigir una gran diócesis, ocupado de la predicación, de la dirección de almas, en la composición de las bellas obras con que enriqueció a la Iglesia, no se dispensaba de rezar diariamente el rosario. Una vez que se vio obligado a posponerlo hasta muy tarde, su vicario le hizo la observación que tenía una extrema necesidad de descanso, y que debía pasarlo para la mañana siguiente. Mi máxima, le contestó el fiel servidor de María, es no dejar nunca para el día siguiente lo que se puede hacer en el momento, y continuó su rosario hasta el final.

Recemos a menudo el rosario y la Santísima Virgen, después de nuestra muerte, nos introducirá en el Cielo.

Traducido del francés por José Gálvez Krüger para ACI Prensa.


jueves, 21 de mayo de 2015

¡Ven, Espíritu Santo!

En estos días previos a la gran fiesta de Pentecostés, que pone fin al tiempo de la Pascua, vamos a pedir al Espírutu Santo que venga, que nos llene, que nos haga Sus Testigos en medio de nuestro mundo. ¡¡¡Espíritu Santo, Ven!!!




Vigésimo Primer Día: Explicación de las Letanías

Domus aurea
Casa de oro. Aunque esta comparación esté muy por debajo de la dignidad y de las virtudes de la Madre de Dios, no deja de tener el mérito de la justicia: ¿No se puede llamar Casa de oro a María, cuyo seno fue el tabernáculo del Hijo de Dios vivo? ¿Aquella que es la obra maestra de la Omnipotencia? Y como el oro es el símbolo de la pureza, María que es por siempre pura y está exenta de pecado, ¿no merece el título de Casa de oro?

Foederis arca
Arca de la Alianza. El arca de la alianza que siempre fue para los judíos el monumento más respetable de su religión, tiene tantas relaciones con María que la Iglesia la mira como una figura de la Madre de Dios. Efectivamente, trayendo a la memoria algunos objetos de comparación, hacemos notar que como las tablas de la antigua ley fueron conservadas en el Arca, el legislador de la nueva, Jesucristo, quiso estar durante nueve meses en el casto seno de María. Y si el Arca traía a los Israelitas los recuerdos de la Alianza que Dios había celebrado con ellos, María nos recuerda, también, la nueva alianza, que el Hijo de Dios nos hizo contraer con su Padre, tomando en el seno de María la vida que entregó generosamente para rescatarnos.

Ejemplo
San Bernardo, célebre Abad de Clervaux, y el último de los Padres de la Iglesia, parece haber asumido el trabajo de reunir, en sus piadosos escritos, todo lo que en los siglos precedentes se había dicho más bello y conmovedor sobre la Santísima Virgen, como si reuniera en su corazón todos los tiernos afectos de sus más fervientes servidores. No se puede leer lo que compuso en alabanza de la Virgen sin sentirse penetrado de respeto, de confianza y de amor por Ella; y él mismo, lo estaba de tal manera, que el recuerdo de sus grandezas y sobre todo de su bondad, le hacía caer en éxtasis. Esta buena Madre quiso mostrar sensiblemente en su persona cuánto atrae las bendiciones el coraje de abandonar los afectos de la naturaleza, en especial sobre aquellos que se parecía abandonar, ya que toda su familia, primeramente tan opuesta a su retiro, terminó por compartir con él sus santas dulzuras.

Roguemos a María llenar nuestros corazones de caridad con el fin de que sean una morada agradable a Jesús cuando baje a Él en la Santa Comunión.

Traducido del francés por José Gálvez Krüger para ACI Prensa


miércoles, 20 de mayo de 2015

Vigésimo Día: Explicación de las Letanías

Rosa mystica
Rosa Mística. Como la Rosa es, entre todas las flores, la flor que más gusta universalmente, tanto por su tierno colorido cuanto por su agradable olor, y por esta causa pasa por reina de las flores, de la misma manera María, llamada alegóricamente por la Iglesia Rosa Mística, es la Reina de los Ángeles y de los hombres, porque sobrepasa a todas las criaturas, incluso a las más perfectas, por la explosión de su gloria y por el mérito de sus sublimes virtudes.

Turris Davidica
Torre de David. María es comparada con la Torre de David, porque esta torre fue antiguamente el más bello ornamento de Jerusalén por su elevada altura y por la belleza de su estructura. María, igualmente, un edificio espiritual que es, después de Dios, en la celeste Sión, el objeto más elevado y el más elevado por la bondad de sus virtudes. En efecto, considerando la grandeza de su dignidad y de los méritos preciosos de María, se comprende que la gloria de que goza en el cielo les sea proporcional; y que todo debe ser incomparablemente grande en aquella que según Agustín es la obra del eterno consejo, en tanto que, San Epifanes llama misterio del cielo y de la tierra.

Torre de marfil
Torre de marfil. Es en  la  expresión del Espíritu Santo, que habla por el órgano de la Sabiduría, que la Iglesia encontró la comparación que se hace de ella, a una torre de marfil. En efecto; por que si comprendemos el sentido figurado, comprenderemos que Salomón escuchó alabar la pureza a María, cuyo brillo y cuya blancura no sólo entran claramente en comparación con la torre del marfil sino que la supera infinitamente.

Ejemplo
El nacimiento de San Luis, Rey de Francia, se debió a María Madre de Dios y a la devoción del Santo Rosario. La piadosa Reina Blanca de Castilla, que fue la madre de este santo rey, lloraba largo tiempo su esterilidad. Santo Domingo, que vivió en la misma época, le aconsejó recurrir a la Santísima Virgen y que practicara el rezo del santo Rosario, y que obligara a las personas más devotas del Reino de hacer frecuentemente en su nombre este homenaje, y le hizo esperar el fruto de bendición que deseaba, por la protección de la Madre de Misericordia. Blanca siguió el consejo con felicidad y fidelidad. En virtud del santo Rosario y de la piedad de la virtuosa princesa obtuvieron pronto el efecto deseado. Tuvo un hijo, y en su hijo un rey, que puso la santidad sobre el trono, que consagró su corona por todas las virtudes cristianas; en una palabra, llevó a su tumba la vestidura de la inocencia bautismal, enriquecida por todos los méritos que hacen los santos y a los grandes santos.

Traducido del francés por José Gálvez Krüger para ACI Prensa.


martes, 19 de mayo de 2015

Décimo Noveno Día: Explicación de las Letanías

Vas spirituale
Vaso espiritual. El título de Vaso espiritual de la Iglesia dado a María no le conviene sólo relativamente al misterio de la Encarnación que se cumplió en Ella; le conviene también respecto de las gracias de las que es vaso admirable. En efecto, María, habiendo sido premunida de todos los dones del Eterno desde su concepción, estuvo llena de gracia antes que el Ángel le anunciara los designios del Altísimo sobre Ella. Además, ¿qué tesoro de gracias llegaría a ser, cuando puso sus cuidados, durante toda su vida, en aprovechar los que ya había recibido? Por eso hay que convenir que de la misma manera que sobrepasa a todas las criaturas en santidad, las supera también en gracias.

Vas honorabile
Vaso honorable. Si el ostensorio, que sirve para exponer la Hostia consagrada es un vaso tan honorable que no está permitido tocarlo sino a los sacerdotes y a las personas consagradas a Dios, ¿María no es, con mayor razón, un vaso de mayor honor, ya que el Verbo divino se encarnó en su seno, y quiso habitar en él nueve meses?

Vas insigne deotinis
Vaso insigne de la devoción. La Iglesia compara a María con un vaso y la llama Vaso insigne de la devoción, porque fue colmada de sentimientos de piedad, que exhibió en todas las circunstancias de su vida, mostrando un fervor que sorprendía en todo lo referido al culto y al servicio de Dios. En efecto, su celo fue tan ardiente, que estuvo bien lejos de limitarse a la obligación indispensable, aplicándose en buscar todas ocasiones de servirlo. Finalmente, puso todas sus delicias en pensar en Dios, en buscar a Dios en todo y a llevar todo hacia Él.

Ejemplo
San Alfonso María de Liborio fue, a la vez, uno de los más ardientes propagadores de la devoción a los Sagrados Corazones de Jesús y de María y uno de los más santos obispos de su tiempo. Animado con una confianza sin límites, se dirigió a Ella en todas sus necesidades, y estaba seguro de obtener todo lo que pedía por su intercesión. Igualmente le complacía a María colmarlo con los favores más señalados; confesó, la víspera de su muerte que Ella se le aparecía a menudo y le decía cosas admirables. Las obras que compuso en alabanza de la Santísima Virgen, llenas de un fuego divino y de una unción conmovedora, dan testimonio de su amor y del celo por Ella.

Recurramos a María, Ella nos concederá la verdadera devoción que consiste en el cumplimiento de todos nuestros deberes y en la aplicación de ser siempre agradable a Dios.

Traducido del francés por José Gálvez Krüger para ACI Prensa 


Décimo Octavo Día: Explicación de las Letanías

Sedes sapientiae
Trono de sabiduría. María mostró, a todo lo largo de su vida un espíritu de sabiduría perfecta, porque representándonos en el momento en que el Arcángel le anunció el misterio de la Encarnación, ¿no percibimos una sublime sabiduría en el diálogo que sostuvo? La veremos en presencia del Ángel tímida por castidad como obediente por humildad, tan discreta en sus preguntas como sabia en sus respuestas. Finalmente, no descubriremos sino las huellas de una sabiduría admirable y consumada en todas sus acciones y palabras. Ella cargó en sus brazos la sabiduría substancial, al Verbo Encarnado.

Causa nostrae laetitiae
Causa de nuestra alegría. Fue en nuestra Redención, en la que cooperó María, que la Iglesia sacó el motivo para saludarla como la verdadera causa de nuestra alegría. En efecto, considerando la naturaleza humana caída por el pecado del estado primitivo de su creación, y a todos los hombres sometidos a la esclavitud del demonio y de la muerte; luego viéndola restablecida en sus derechos por la Encarnación de Jesucristo, y a los hombres de esclavos del demonio, convertidos en hijos de Dios, ¿no se reconoce que María (de quien nació el Mediador que reconcilió a los hombres con Dios) nos procuró el más grande honor, y que debe ser, por consecuencia, la causa de nuestra mayor alegría?.

Ejemplo
El año 1749, una mujer virtuosa fue condenada a muerte por la acusación de su marido, hecha sobre falsas conjeturas que la hicieron pasar por culpable de infidelidad, siendo ella inocente. Recurrió a la gran Consoladora de los afligidos; lloró a los pies de la Santísima Virgen, la invocó, le encomendó insistentemente su inocencia, su honor y su vida; y esta Madre de Gracia, que nadie invoca nunca en vano, la tomó tan bien bajo su protección, que el verdugo no llegó a quitarle la vida, La tomó por muerta, luego de realizar su trabajo, pero luego de retirarla del patíbulo, algunas horas después de la ejecución, para llevarla a enterrar, mientras era llevada a la Iglesia, no sólo dio signos de vida, sino que se levantó, se arrojó a los pies de una imagen de la Santísima Virgen, publicó en voz alta que Ella era su liberadora, y que se le había aparecido durante la ejecución, para aumentar sus esperanzas y quitarle sus temores. Todos aquellos que fueron testigos bendijeron a la Madre de misericordia y renovaron su confianza en su bondad.

En las aflicciones, recurramos a María, Ella nos consolará y pondrá en nuestro corazón la alegría cristiana.

Traducido del francés por José Gálvez Krüger para ACI Prensa 


domingo, 17 de mayo de 2015

XLIX Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales 2015


49 Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales
Este Domingo, 17 de Mayo, coincidiendo con la Solemnidad de la Ascensión del Señor a los Cielos, la Iglesia celebra la “Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales”.
Un día de especial reflexión para orar, de un modo especial, por todos los periodistas y comunicadores sociales, para que anuncien con alegría la Buena Noticia del Evangelio y sean servidores de la Verdad en medio de nuestro mundo.
¡Id por todo el mundo y predicad el Evangelio a todas las creaturas!

Solemnidad de la Ascención del Señor a los Cielos

Ascensión del Señor
Oración preparatoria (para ponerme en presencia de Dios)
Señor, Tú eres el centro de mi vida. Tu ascensión al Cielo me invita a crecer en el amor a los demás para poder aspirar a estar un día gozando de tu presencia. ¡Cuántas cosas buenas por hacer! Gracias por este tiempo de oración, en el que quiero profundizar en todas estas verdades de mi fe, para poder llevarlas a la práctica, día con día.

Petición (pide lo que buscas conseguir en esta meditación)
Señor, enciende en mi corazón, en mi intelecto y en mi voluntad, el deseo del Cielo.

Evangelio del día (para orientar tu meditación)
Del santo Evangelio según san Marcos 16, 15-20.
En aquel tiempo, se apareció Jesús a los Once y les dijo: "Id por todo el mundo y predicad el Evangelio a toda creatura. El que crea y se bautice, se salvará; el que se resista a creer, será condenado. Estos son los milagros que acompañarán a los que hayan creído: arrojarán demonios en mi nombre, hablarán lenguas nuevas, cogerán serpientes en sus manos, y si beben un veneno mortal, no les hará daño. Impondrán las manos a los enfermos y estos quedarán sanos".
El Señor Jesús, después de hablarles, subió al Cielo y está sentado a la derecha de Dios. Ellos fueron y proclamaron el Evangelio por todas partes, y el Señor actuaba con ellos y confirmaba su predicación con los milagros que hacía.
Palabra del Señor.

Reflexiona lo que Dios te dice en el Evangelio (te sugerimos leer esto que dijo el Papa).
«Jesús parte, asciende al Cielo, o sea vuelve hacia el Padre, quien le había enviado al mundo. Hizo su trabajo y retornó al Padre. Pero no se trata de una separación, porque él se queda siempre con nosotros, de una nueva manera. Con su ascensión el Señor resucitado atrae la mirada de los apóstoles -y también nuestra mirada- a las alturas del Cielo para mostrarnos que la meta de nuestro camino es el Padre. Él mismo dijo que se habría ido para prepararnos un lugar en el Cielo.
Entretanto, Jesús se queda presente y operante en las situaciones de la historia humana con la potencia y los dones de su Espíritu; está al lado de cada uno de nosotros: lo mismo si no lo vemos con los ojos, Él está, nos acompaña y guía, nos toma de la mano y nos levanta cuando caemos.
Jesús resucitado está cerca de los cristianos perseguidos y discriminados, cercano a cada hombre y mujer que sufre, está cercano de todos nosotros.» (Homilía de S.S. Francisco, 1 de junio de 2014).

Diálogo con Cristo
Ésta es la parte más importante de tu oración, disponte a platicar con mucho amor con Aquel que te ama.

Propósito
Proponte uno personal. ¿Qué? El que más amor implique… o, si crees que es lo que Dios te pide, vive lo que se te sugiere a continuación.
En nombre de Cristo, tender, hoy, una mano a quien lo necesite compartiendo con generosidad un bien material.

«Consideren bien qué poco valor tienen las cosas que pasan con el tiempo. El fin que tienen todas las cosas temporales nos manifiesta cuán poco vale lo que he podido pasar […]. Fijen su amor en el amor de las cosas que perduran.»
(San Gregorio Magno, Homilía sobre los Evangelios).

http://meditaciones.regnumchristi.org/

Coro Gospel Good News


Décimo Séptimo Día: Explicación de las Letanías

Virgo fidelis
Virgen fiel. María, siempre fiel a la ley del Señor, lo fue también a los designios de la Providencia. Dios le hizo saber, de un momento a otro, por su esposo José, que había que huir con el Niño Jesús a Egipto. María no busca en lo absoluto comprender la voluntad del Señor, y sin razonar sobre los obstáculos que parecen presentarse en un viaje tan penoso, largo y peligroso, María obedece, parte, y la orden de Dios le sirve de razón. Instruida por las profecías acerca de los tormentos que Jesucristo, su Hijo, debía soportar, tenía el alma triste, pero la sumisión estaba de acuerdo con la voluntad de Dios Altísimo. ¡Fidelidad preciosa de María! ¡Quien podrá admirarte suficientemente, cuando la condujiste al pie de la cruz y a recibir los últimos suspiros de su Hijo!

Speculum justitiae
Espejo de justicia. María es el espejo de las virtudes más perfectas, porque, destinada a la gloria de ser la Madre de Dios, cuya dignidad supera incomparablemente todas las grandezas humanas, y que es la más alta a la que puede ser elevada una criatura, debió ser enriquecida con las virtudes que convenían a esta sublime elevación, y si según Tomás de Villanueva, San Juan, sólo por causa de su calidad de precursor del Mesías fue santificado en el seno de su Madre e hizo cosas tan extraordinarias, que entre todos los hijos de las mujeres, según el testimonio del Salvador, no hubo nadie más grande que Juan Bautista.¡Qué decir de la santidad de aquella que concibió y llevó en su seno al autor de todas, la virtud de la santidad misma, en fin, el Verbo Eterno que es Dios!

Ejemplo
Un soldado, apellidado Beau-Séjour, rezaba todos los días siete Padre Nuestros y siete Ave Marías, en honor de las 7 alegrías y de los siete dolores de la Santísima Virgen. Nunca se olvido de satisfacer esta obligación, y si se acordaba, luego de haberse acostado que no lo había hecho, se levantaba al instante y rezaba esta oración de rodillas. Un día de batalla, Beau Séjour se encontró en la primera línea de combate, en presencia del enemigo, esperando la señal de ataque, se acordó que no había dicho su oración acostumbrada; de inmediato comenzó a decirla haciendo la señal de la Cruz. Sus compañeros, dándose cuenta, empezaron a burlarse y las burlas pasaron de boca en boca, pero Beau-Séjour, sin inquietarse, continuaba su oración. Una vez terminada ésta, los enemigos hicieron la primera descarga; y Beau Séjour, sin haber recibido un solo disparo, quedó solo en la línea. Vio muertos, a sus lados, a todos aquellos que antes se reían de él y se burlaban de su devoción. No pudo dejar de estremecerse ante tal vista y de reconocer la mano de la poderosa Protectora que lo había salvado. El resto de la batalla y aun de la campaña, que mató mucha gente, no recibió ni una sola herida. Habiendo recibido finalmente su baja, volvió a su casa y publicó por todos lados las alabanzas de María, de quien se reconocía deudor de vida y salud (Récits d’histoires).

Seamos fieles a nuestros ejercicios de piedad hacia María y nos será fiel a la hora del peligro.

Traducido del francés por José Gálvez Krüger para ACI Prensa.


Décimo Sexto Día: Explicación de las Letanías

Virgo potens
Virgen poderosa: María, que es la Reina de los Ángeles y de los hombres, es la soberana de todas las criaturas, y reina al costado de Aquél que está sentado por encima de los querubines, que mueve los cielos, que cambia los tiempos, que manda los vientos y a las tempestades, y que altera los elementos. Ahora bien, como todo es posible en el cielo y sobre la tierra al Amo de la naturaleza, toda la naturaleza debe obedecer, toda la naturaleza debe obedecer a aquella a quien Él mismo estuvo sometido. Por eso, los Ángeles y los Santos, que son testigos del gran poder de María, se apresuran a rendirle los homenajes y la obediencia que le deben.

Virgo clemens
Recurran, pobres pecadores, recurran a María, cuyo trono es accesible a los desventurados, y no duden de la buena voluntad y del poder de esta Madre de clemencia, que está siempre dispuesta a recibir y que Jesús no tiene nada que rehusar a aquella por cuya intercesión hizo su primer milagro y que Él destinó para ser Abogada de los pecadores. Recurran a María, ustedes que son sus fieles servidores, recurran a Ella con confianza; que si los grandes pecadores encuentran en Ella los auxilios que necesitan, ustedes no dejarán de recibir los favores que Ella concede, particularmente a aquellos que la aman y que la sirven, imitando sus virtudes.

Ejemplo
Juan, Emperador de Oriente, dio una prueba sorprendente de la devoción que tenía a las imágenes de la Madre de Dios. Los escitas habían irrumpido violentamente en la Tracia; concretando una usurpación digna de su mala fe, se convirtieron en los amos. El Emperador, en estas circunstancia que le hacía perder una bella provincia de su imperio, recurrió a la Reina del Cielo; y por la intercesión visible que recibió su ejército, rechazó a los bárbaros y los puso en fuga. Entonces, lejos de ser ingrato hacia su libertadora, quiso cederle los honores de esta victoria. Hizo colocar su pintura sobre un carro de triunfo magníficamente tirado por cuatro caballos blancos, montados por los príncipes de su Imperio; y él, presidiendo todo su cortejo, iba a pie, con la cabeza descubierta, delante del carro de triunfo, con una cruz en la mano, otorgando a María toda la gloria. Honremos, a ejemplo de esos grandes personajes, en todas las formas que dependan de nosotros, a las imágenes de la Reina del Cielo.

Pidamos a María proteger a la Iglesia y a las familias cristianas contra nuestros enemigos.

Traducido del francés por José Gálvez Krüger para ACI Prensa.


viernes, 15 de mayo de 2015

Fiesta de San Isidro Labrador en Baltanás


Hoy, 15 de Mayo, celebramos la Festividad de San Isidro Labrador, Patrono de los Agricultores. En Baltanás, como en tantos y tantos pueblos y ciudades de España, le rendiremos culto de manera especial. Los actos comenzarán a las 13:30 horas con la Procesión y Bendición de los Campos. Acto seguido, se celebrará la Eucaristía Solemne en honor a San Isidro Labrador. La jornada continuará en un ambiente festivo con una comida de hermandad y varios campeonatos de juegos de mesa y juegos populares durante la tarde.
Que San Isidro Labrador nos ayude a confiar en Dios, a acudir siempre al Señor para que sea Él quien guíe nuestras vidas. Pedimos también a San Isidro Labrador que proteja nuestros campos, ganados y demás actividades. Que San Isidro Labrador nos ayude a crecer en la humildad, la entrega y el amor a Dios y a los hermanos.

Día 15 de Mayo, Festividad de San Isidro Labrador


San Isidro Labrador nace en Madrid el 4 de abril de 1082, donde vive humildemente con su familia hasta que, ante la inminente invasión árabe, se traslada a Torrelaguna. Allí se casa con Santa María de la Cabeza, en el 1109, y 10 años después regresa a Madrid para trabajar como criado para la familia Vargas, viviendo en la casa que ésta tenía para los mozos de labranza, junto a la Parroquia de San Andrés. Allí nace su único hijo, Juan.
Labrador y carpintero de vida sencilla, marcada por una profunda fe y devoción a la Virgen, y espíritu caritativo. Todos los días, de madrugada, acudía a la iglesia de Santa María de la Concepción, hoy Catedral de la Almudena, y a la Ermita de Santa María Magdalena, por la que tenía especial devoción. Por la tarde, repetía sus itinerarios marianos, lo que provocaba las críticas de algunos de sus compañeros, que le calumniaban por tener abandonado el trabajo. Además de esta vida de oración y este fervor por la Virgen, se consagró a los pobres, con la ayuda de su mujer, que compartía con él su amor por los más necesitados.
Sus milagros, muy sencillos, se correspondían con su tipo de vida. Así, una vez hizo brotar un torrente de una roca, para dar agua a su amo sediento. Salvó con sus oraciones a su hijo Juan, que cayó a un pozo, del que fue salvado milagrosamente. Su patrón fue testigo de algunos de estos milagros, por lo que cuando San Isidro murió, el 30 de noviembre de 1172, a los 90 años, todos lo consideraban ya un Santo.
Enterrado primero en el cementerio de la Parroquia de San Andrés, fue trasladado a la Iglesia, ya que la lluvia desenterró su cuerpo incorrupto. Alfonso VIII en 1212 mandó que hicieran un arcón para enterrar su cuerpo. Allí permanece hasta 1619, fecha en que es beatificado por la Santa Sede, con 438 milagros aprobados. Pablo V firma el decreto y se fija su fiesta para el 15 de mayo. Fue canonizado en 1622 por el Papa Gregorio XV. En tiempos de Carlos III, su cuerpo se traslada a la Colegiata donde se encuentra hoy.
El 11 de agosto de 1697, Inocencio XII declara a su mujer Beata, y en 1752 es proclamada como Santa María de la Cabeza.

Fuente:  https://www.aciprensa.com/santos/santo.php?id=403



Décimo Quinto Día: Explicación de las Letanías

Virgo veneranda
Virgen venerable. Leemos en la Escritura que cuando Betsabé fue a encontrarse con Salomón para hablarle, este rey se levantó prestamente para hacerle los cumplimientos que merecía, y que después de haberla saludado respetuosamente, la sentó en un trono que hizo colocar al lado del suyo, con el fin de honrar públicamente a la autora de sus días. Ahora bien, si este honor convenía a la madre de un Rey, ¿qué gloria, qué distinción conviene a aquella que, por su calidad de Madre de Dios, tiene derechos incomparablemente más santos y mas claros a los honores? Igualmente, Jesucristo para honrar a María, le concedió todos los privilegios y la preeminencia que convenía a tal Hijo conceder a tal Madre. Igualmente, Ella forma en el Cielo un rango aparte: tiene un orden separado, siempre, debajo de Dios, pero siempre por encima de lo que no es Dios.

Virgo predicanda
Virgen digna de alabanza. Esforcémonos por ofrecer a María el tributo de nuestras alabanzas y, a ejemplo de esta señora que exclamó al ver al Salvador: Dichosas las entrañas que te tuvieron y los pechos que te amamantaron; celebremos su gloria y su honor, porque todo es honorable en ella, que el cielo y la tierra no presentan un objeto más digno de nuestros homenajes y de nuestras alabanzas, después de Dios, que María.

Ejemplo
El admirable San Luis, honor y ejemplo de los reyes, tenía una devoción tan tierna y tan viva por la Santísima Virgen, y tanto amor por su humildad, que para honrarla y para imitarla, hacia reunir todos los sábados, días consagrados a María, una multitud de pobres en su palacio, en su apartamento mismo. Ahí, siguiendo el ejemplo del Salvador, les lavaba los pies en una vacía y los secaba con sus manos reales; enseguida, les besaba con un respeto que hacía ver que reconocía en ellos a los miembros de Jesucristo; después de aquello, para juntar la caridad con la humildad, los hacía comer, y los servía él mismo en la mesa. Terminaba con una rica limosna que distribuía a cada uno de ellos, siempre en honor de la Reina del cielo y de la tierra. Había deseado morir un sábado, como para coronar con el homenaje de sus últimos suspiros todos los honores que había rendido cada semana de su vida ese día. Fue escuchado. María quiso que ese día de honor para Ella fuese también el de la entrada a la gloria al cielo para su fiel servidor.
 
Merezcamos, por nuestra caridad, que los pobres nos alaben delante de Dios.

Traducido del francés por José Gálvez Krüger para ACI Prensa.


jueves, 14 de mayo de 2015

Décimo Cuarto Día: Explicación de las Letanías

Virgo prudentissima
Virgen prudentísima. ¿Quién podrá concebir la sabia prudencia que María conservó en el momento en que el enviado del Padre eterno se presentó delante de Ella? Cuando la llamó llena de gracia y bendita entre las mujeres, Ella se turbó, y no comprendió como semejante elogio podía serle dirigido: a la vista del grado de elevación al que se le destinaba, se humilló delante de Dios y se creyó dichosa de merecer la calidad de esclava. Luego, recibiendo la confirmación del Ángel, no dudó que todo lo que se le acababa de anunciar ocurriría; y lo creyó sin buscar comprenderlo. Ella no pidió un signo, no dudó como Zacarías. Ninguna objeción al Ángel, ninguna pregunta y ninguna curiosidad propia del alma débil. María no dijo más que las palabras absolutamente necesarias, unas para destacar el voto de virginidad que había hecho, las otras para destacar su obediencia a la voluntad del Señor. Tal fue la prudencia sublime de María que debemos admirar siempre, ya que es imposible alabarla tan dignamente como merece.

Ejemplo
El bienaventurado Simón Stock pedía a menudo a la Santísima Virgen que la enseñara una forma en que pudiera honrarla. Un día que estaba en oración delante de la imagen de la Santa Madre de Dios, se le apareció llevando en sus manos un Escapulario, que le dio, agregando que era el medio que Ella deseaba que utilizara para servir a su gloria, y que lo mirara como un signo de salvación, de suerte que cualquiera que lo llevara santamente hasta la muerte, no caería en las penas del infierno. Los Soberanos Pontífices, que expidieron bulas y concedieron indulgencias a favor de esta devoción, incluso los reyes como San Luis, se apresuraron a entrar en la Asociación del Escapulario. Pero nada sirvió más para difundir esta santa devoción que los prodigios que el Cielo operó a favor del Escapulario. Uno de los más señalados, fue el que ocurrió en el sitio de Montpellier. Un soldado que llevaba consigo esta prenda de devoción a María, recibió una herida de mosquete cuando se lanzaba al asalto; pero la bala, después de haber atravesado su uniforme, se detuvo frente al escapulario sin hacerle ningún mal. Luis XIII, que se encontraba en el sitio, fue testigo de este prodigio  de protección. En consecuencia, se apresuró a tomar este santo hábito cuyo efecto sorprendente acababa de ver.

Imitemos la prudencia de la Santísima Virgen, llevemos su Escapulario, porque María nos protege contra el peligro, especialmente a la hora de la muerte.

Traducido del francés por José Gálvez Krüger para ACI Prensa


miércoles, 13 de mayo de 2015

SOS Damnificados del Terremoto de Nepal

Nuestra Cofradía también ha colaborado con los damnificados a causa del terremoto de Nepal. Os invitamos a ser generosos y colaborar con los peor lo están pasando en estos momentos... El dolor de nuestros hermanos debe ser también nuestro dolor.

Ave María de Fátima


Oración a la Virgen de Fátima


Oración a la Virgen de Fátima

Oh Virgen Santísima, Vos os aparecistéis repetidas veces a los niños; yo también quisiera veros, oír vuestra voz y deciros: Madre mía, llevadme al Cielo. Confiando en vuestro amor, os pido me alcancéis de vuestro Hijo Jesús una fe viva, inteligencia para conocerle y amarle, paciencia y gracia para servirle a Él y a mis hermanos, y un día poder unirnos con Vos allí en el Cielo.

Padre nuestro, Avemaría y Gloria.

Madre mía también os pido por mis padres, para que vivan unidos en el amor; por mis hermanos, familiares y amigos, para que viviendo unidos en familia un día podamos gozar con Vos en la vida eterna.

Padre nuestro, Avemaría y Gloria.

Os pido de un modo especial por la conversión de los pecadores y la paz del mundo; por los niños, para que nunca les falten los auxilios divinos y lo necesario para sus cuerpos, y un día conseguir la vida eterna.

Padre nuestro, Avemaría y Gloria.

Oh Madre mía, sé que escucharás, y me conseguirás estas y cuantas gracias te pida, pues las pido por el amor que tienes de tu Hijo Jesús. Amén.

¡Madre mía, aquí tienes a tu hijo, sé tu mi Madre!
¡Oh dulce Corazón de María, sed la salvación mía!

Décimo Tercer Día: Explicación de las Letanías

Mater creatoris
Madre del Creador. Este augusto título de Madre del Creador conviene más a María que, no sólo su Hijo en tanto que Dios creó todas las cosas que existen, sino que, además, nos concedió la gracia de encontrar en Él un nuevo ser, una vida divina, lo que es como una segunda creación. A decir verdad, el pecado mortal nos desnaturaliza, nos reduce como a la nada; así lo confesó David después de haber pecado: Me vi reducido a la nada. Pero el hijo de María nos retira de esa nada, renovándonos por su gracia, de tal manera que, según san Pablo, nos convertimos en una nueva criatura en Jesucristo.

Mater salvatoris
Madre del Salvador. Mucho tiempo antes del nacimiento de Jesucristo, el Profeta Isaías había predicho que una Virgen concebiría, y que nacería de Ella un niño, que sería llamado Emmanuel, que significa  Dios con nosotros. José, el Esposo de María, fue particularmente instruido por el Ángel que le dirigió estas palabras: Lo que ha nacido en Ella ha sido formado por el Espíritu Santo, dará a luz un niño, a quien le pondrás por nombre Jesús, es decir Salvador, porque salvará a su pueblo. Ahora bien, las predicciones que se verificaron prueban evidentemente que María es la Madre del Salvador del Mundo.

Ejemplo
Se ha relatado, en la historia de Santo Domingo, que ese gran hombre, predicando en el Languedoc a un pueblo obstinadísimo en la herejía, se quejaba humildemente a la Santísima Virgen del fruto de sus predicaciones. La Madre de Dios quiso responderle que tal como el Señor había hecho preparar, por el saludo del Ángel, el misterio de la Encarnación que debía operar la salvación del mundo, se requería que imitase esta conducta, y que pusiese en valor la devoción al Ave María, persuadiendo al pueblo que usara el Rosario; Ella le aseguró que si lo hacía, vería pronto los frutos de salvación que obtendría. Sucedió, en efecto, lo que la Virgen había prometido. Santo Domingo ganó más almas  a Dios por el mérito del Ave María que por ningún otro medio: fue esta oración, repetida con confianza, lo que dio virtud a sus predicaciones y que las hizo tan fructuosas, por la multitud de herejes que devolvió a la fe. La Iglesia está tan persuadida de la gracia que el Cielo le ha concedido, para producir frutos de salvación en las almas, que alienta a todos lo predicadores a comenzar sus discursos con el Ave María, para preparar, mediante este divino rocío, a las almas de los auditores a recibir con fruto la sagrada palabra.

Cuando recitemos el Ave María, no olvidemos que nos dirigimos a la Madre de nuestro Salvador Todopoderoso, sobre el Corazón de su divino Hijo.

Traducido del francés por José Gálvez Krüger para ACI Prensa.


Duodécimo Día: Explicación de las Letanías

Mater amabilis
Madre amable. Sólo cuando se pronuncia el nombre de María con devoción, se siente en el corazón la dulzura y los atractivos del amable nombre de la Madre de Dios, que es, como decía David de Jonathás, amable por encima de todas las mujeres. Que alegría pura, qué suave placer no se debe experimentar, por consecuencia, considerando el mérito y la bondad de quien es elegida desde la eternidad. ¿Se osaría, después de esto, poner en paralelo bondad de María con los encantos de Rebeca o los atractivos de Raquel, la figura de Esther o el noble caminar de Judith? Ciertamente no; hay que convenir que María, por su calidad de Madre de Dios las supera en gracias, en belleza y en perfecciones. Es lo que la Iglesia reconoce cuando, considerando la augusta calidad de Madre de Dios en María, declara que no sabe qué expresiones emplear para publicar todas sus alabanzas.

Mater admirabilis
Madre admirable.  Las grandezas de María están por encima de todo lo que podamos concebir; nos hacen convenir que Ella es lo más admirable que hay en la creación. Igualmente se le puede aplicar en verdad las palabras del profeta Isaías que dijo de Jesucristo: Su nombre será llamado admirable; porque, considerando que Ella fue el fruto milagroso de una Madre estéril que concibió del Espíritu Santo y que se convirtió en Madre de Dios, ¿no se impone declarar que todo es admirable en María?.

Ejemplo
Roma expresa a María un reconocimiento que el tiempo no puede debilitar y la Madre de misericordia favorece con milagros a su ciudad bien amada. En 1842, un pobre mendigo, reumático de las dos piernas, conocido por la ciudad entera, iba regularmente a pedir su curación delante de la Madonna del palacio Cenci. Cansado de no conseguir nada, dijo un día a su divina Madre, en un lenguaje familiar a la piedad italiana: Hace tiempo que vengo y no he sido curado; pues bien, ésta es la última vez que vengo. Toma mis muletas, ya no quiero servirme de ellas, y me quedo aquí, a menos que me devuelvas las piernas. La oración de la piedad penetró el Cielo. El enfermo fue curado, y no cabía en sí de gozo. La multitud que lo rodeaba grita, llora, canta, la felicidad era general. La Madonna fue magníficamente iluminada durante tres días y tres noches; las orquestas se sucedieron para celebrar las alabanzas de aquella a la que no se invoca en vano.

El poder de María delante de su divino Hijo es admirable, todos podemos pedirlo.

Traducido del francés por José Gálvez Krüger para ACI Prensa.


Undécimo Día: Explicación de las Letanías

Mater inviolada
Madre sin mancha. Las comparaciones que se emplean para explicar la integridad milagrosa de María, a la que se compara comúnmente a un espejo, que nos perturbada en lo absoluto por los rayos del sol que lo penetran, siendo insuficientes y por debajo del misterio de una Virgen Madre, no se puede sino admirar en un respetuoso silencio, la manera extraordinaria en la que el Hijo de Dios quiso ser concebido y nacer. ¿Le fue más difícil salir del seno de su Madre sin violar su pureza que salir de su tumba sin remover la piedra, sin quebrar el sello?

Mater intemerata
Madre sin corrupción. En efecto, ¿no convenía que María, que había estado unida a su divino hijo en los decretos eternos de la Providencia, fuese impecable por la gracia, como Jesucristo lo fue por su naturaleza? ¿Y no convenía que la Madre de un Dios no haya debido ni podido estar un instante bajo el imperio del pecado? Igualmente, San Agustín quería que no se hiciese mención de María cuando se hablara del pecado. No podemos hacer nada mejor que compartir los sentimientos de ese gran Doctor; y reconociendo a María como Madre de Dios, reconozcámosla como una Madre que estuvo exenta de toda corrupción.

Ejemplo
El P. de Smet, misionero de la Compañía de Jesús, en medio de las naciones salvajes de América del Norte, abordaba, hace algunos años, a la poblada de los Pottowatomies, que viven sobre las márgenes de los Osages. Como se descargaba sus efectos, se llevó a bordo a un muchacho que estaba peligrosamente enfermo. Se hacía tarde ya, y debido al equipaje, el misionero no podía ir a la cabaña que el gran jefe le había preparado. Seguí, pues, sobre el barco. Ahora bien, durante la noche, el joven enfermo sufrió mucho. Los suspiros que le arrancaba el dolor impulsaron al P. de Smet a entrar en su cuarto, con el fin de aliviarlo o de consolarlo. Esta intención caritativa del misionero conmueve al muchacho, que le abre su corazón. “Soy católico, dijo, incluso recibí una educación del todo cristiana de uno de mis tíos, que era un eclesiástico lleno de celo. Practiqué mucho tiempo la piedad y, en especial, siempre tuve una especial devoción por la Madre de Dios. Hace seis años que viajo por las montañas, en medio de una tribu salvaje, sin haber encontrado ningún sacerdote y, sin embargo, nunca olvidé a María”. “Sin duda es Ella la que me conduce ante usted, hijo mío, respondió el venerable misionero; ella quiere verificar en su persona las palabras de San Bernardo; que nunca se la ha invocado en vano. Créame, aproveche de esta gracia que le ha concedido. Hace tiempo que no ha purificado su conciencia, tal vez tenga reproches que hacerse. Comience su confesión”. El muchacho accedió de buena gana a la invitación del ministro caritativo; se confesó en medio de grandes sentimientos de piedad y recibió también la Extremaunción. El P. de Smet supo después que había muerto al día siguiente de su llegada.

Si nos encontramos frente a grandes dificultades cuando cumplimos nuestro deber, recurramos a María.

Traducido del francés por José Gálvez Krüger para ACI Prensa.