Hoy es el
día de especial fraternidad para todos los Hermanos de la Cofradía. Además de
celebrar los Oficios, Procesionamos varios Pasos por nuestras calles y plazas:
Ecce-Homo, Nuestro Padre Jesús Nazareno, Cristo de la Esperanz -portado por
nuestros niños-, la Cruz Desnuda... También velamos al Señor en el Monumento y
luego compartimos una cena de hermandad, con la jura de varas de los nuevos
Hermanos, la rifa para recaudar algún donativo para la Cofradía, el homenaje a
nuestros Difuntos,... Es un día gozoso, donde compartimos la fe, la vida y la
mesa, en un ambiente fraternal, haciendo camino juntos, creciendo como hermanos,
unidos en un mismo corazón y en un mismo sentir...
Hoy, de un
modo especial, seguiremos unidos, recordando, pasando por el corazón, la
emoción de celebrar juntos la Cena del Señor, el lavatorio de los pies, el
silencio ante Jesús presente en la Eucaristía y reservado en el Monumento, el
esfuerzo y entrega de portar nuestros Pasos, la alegría de compartir mesa y
mantel... Recuerdos y vivencias que nos llenan de emoción y actualizan, de
algún modo, esa Semana Santa que cada año esperamos y vivimos con tanta entrega
y devoción...
Gracias,
Jesús por tu presencia silenciosa en la Eucaristía. Gracias Jesús por
enseñarnos el mandato nuevo, el mandato del Amor, de la entrega generosa al
hermano.
Hoy resuenan
en nuestros corazones aquellas palabras tuyas: “Nadie tiene amor más grande que
el que da la vida por sus amigos”.
Nosotros,
Señor, queremos dar la vida por los demás, queremos ser ese grano de trigo que
muere y da fruto, queremos amar como Tú nos amas, queremos vivir siempre en
actitud de servicio, haciendo que las cosas sencillas sean un canto de acción
de gracias al Creador... Señor, gracias por quedarte siempre con nosotros en la
Eucaristía, fuente de esperanza y de vida para nuestras vidas... Gracias,
Jesús, por amarnos tal y como somos...
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